lunes, 8 de octubre de 2007

Cambio radical

Casetas, en poco tiempo, a pasado de ser un barrio degradado, oscuro, descuidado, sucio... a ser un barrio vistoso, con un buen puñado de construcciones que parecen haber bombardeado el barrio sin pudor. Hablo, por ejemplo, de la reciente construcción del Paseo Ciudadano. Supuestamente mejora la circulación a través del barrio y, lo que si es verdad, mejora la movilidad para los viandantes (entre los que me incluyo). Pero no es la única obra reciente que ha dado un cambio radical al barrio, aunque seguramente si sea la que más repercusión a tenido y la que más impacto a causado. Muchos de los edificios más emblemáticos de la localidad (el horno de la catalana, por ejemplo), han sido derruidas sin piedad para dar paso a una hecatombe de especulación del terreno, que desemboca en la construcción de pisos de varias plantas con fachadas "de buen ver" para el ojo moderno, pero de mal gusto para el que lleva toda la vida caminando entre casas bajas por un barrio en el que hasta ahora, no hacia falta alzar la cabeza para ver el cielo. Pero así son las cosas. Ya lo decía alguno, o te modernizas, o mueres. Y ahora las calles de este lugar se ciernen entre las espesas sombras provocadas por estas construcciones. En este articulo, quería referirme a varios lugares simbólicos de Casetas, que han sido pasto de escavadoras y demás maquinaria de obra. "El horno de piedra de la catalana". Quien no ha comido nunca unas magdalenas, barras de pan y demás productos artesanos de esta panadería/pastelería. Y no solo eso, cualquier tipo de comida te la podían preparar allí. Ahora es un solar a la espera de unos bloques de edificios y de la llegada de nuevas vidas al barrio. "El campo de cross". Lugar en el que tantas generaciones han pasado su infancia, donde muchos niños, hoy ya convertidos en jóvenes adultos, aprendieron a montar en bicicleta, o donde se han escondido muchos otros de la mirada de sus padres con un cigarrillo a medias... A dado lugar a 4 nuevas calles que conectan La Alameda con el barrio, aunque lleva cerrado el paso cerca de 2 años. "La Harinera del Ebro". Uno de los edificios con más patrimonio en Casetas. Fábrica que dio de comer durante muchos años a un gran número de familias. Ahora espera, llena de silencio y frío, el aplastante ruido de la maquinaria de obra más diabólica que acabe con su existencia. Y muchos otros lugares que están pasando a la historia, por culpa de esta extraña tendencia a la modernización que esta causando estragos en poblaciones pequeñas como Casetas. Si siguen así, el barrio estará irreconocible para mis ojos, aunque siempre siga siendo el mismo dentro de mi. Claro está, que ninguna de estás obras satisfacen mi mal pensar. Todavía no he visto indicios de que desaparezca la base militar (que ocupa un 39% del suelo urbanizable del barrio). Ni tampoco el cuartel de la Guardia Civil, instalado prácticamente en el centro del barrio (a ojos del político, a las afueras de Zaragoza). Espero que acabe ya esta pesadilla de grandes dimensiones y que me dejen vivir tranquilo en este lugar como siempre.

1 comentario:

Peter Beckman dijo...

¿Qué pasa Franfran?, te veo quemado con el cambio del barrio, y te entiendo, pero aún así coge la foto más antigua que tengas de una calle de Casetas y comprobarás que no tiene nada que ver con la misma calle en años tiempos, no nos queda más que acostumbrarnos.
No creas que no me jode ver que desaparecen casas bajas para dar lugar a altos edificios, para mí no hay nada con tanto encanto como una casa, y ahora mires dónde mires al cielo te encuentras una grúa, y sí da por el culo.
Otra cuestión, especulación por supuesto, pero con respecto al tema del horno y la harinera que sirven como ejemplo, ¿son derruídos por orden de las constructoras o son derruídos con permiso de los dueños?.
La harinera es un pedazo de sitio que podría servir para hacer un centro cultural para la juventud, o si tuviéramos dos huevos todos, ocuparlo y crearlo.
Un salute sucio.